EL JUEGO SIMBÓLICO

               

A partir de los dos años y medio-tres, el niño empieza a “fantasear” e imitar la realidad que le rodea. Comienza la etapa del llamado Juego simbólico.

Es el inicio de un proceso a través del que se dan cuenta del mundo en el que viven y comienzan a imitar gestos y acciones de los adultos. Son como pequeños imitadores del mundo que les rodea. En esta etapa del desarrollo debemos ser muy conscientes de que repetirán nuestras actitudes y comportamientos, sea cual sea, ellos aún no tienen la capacidad de distinguir si es bueno o malo, simplemente repiten lo que ven.

Por lo tanto, es de vital importancia actuar de forma correcta con respeto a los demás y enseñarles,  a través del juego, nuestros valores y creencias. Es el momento para transmitirle valores como respeto, colaboración, trabajo en equipo, etc.

Coincide, además, con la etapa en que el niño inicia el proceso de transformarse en autónomo, es decir, quiere vestirse y comer sólo, quitarse el pañal, etc. Estar a su lado es fundamental para que lo haga sintiendo nuestra cercanía.

Es el instante perfecto para inculcarles el gusto por la lectura; dado que harán lo que vean, conviene que, un rato al día, os sentéis a leer un libro a su lado o el periódico, ellos harán lo mismo que vosotros. Pero recordar que tiene que ser un juego, están descubriendo los roles de la sociedad y están descubriendo el mundo que les rodea.

Aunque no tengan bien desarrollado el lenguaje, no significa que no tengan la capacidad de entendimiento, por lo que debemos estar muy pendientes de lo que se dice o se habla delante de ellos, lo entienden todo aunque no sean capaces de demostrarlo con el habla. En la forma de juego demostrarán que les influye todo lo que pasa a su alrededor. Por eso, para el correcto desarrollo del niño, es tan importante un ambiente relajado, de cariño y respeto, donde el niño se sienta seguro y pueda desarrollar correctamente su personalidad y genere una buena relación con el entorno que le rodea, cosa que le ayudará a encajar mejor en la sociedad y a ser una persona más segura de sí misma.

En esta edad empiezan a entender que viven en una sociedad en la que tendrán que integrarse. Para ayudarles a su mejor comprensión del entorno, podemos darles un paseo por el barrio e irles enseñando las diferentes tiendas, personas que viven por allí e ir explicándoles las diferentes profesiones de la gente que le rodea...será muy divertido para él ver cosas diferentes y irá aprendiendo y saciando su curiosidad!